Esta mañana he estado con mi sobrina pequeña entre recortables, cuentos, cartas de personajes de la tele y coreografías infantiles varias. A media mañana me ha dicho que quería enseñarme algo: su carpeta de tareas del colegio.
Con la máxima de mis emociones he ido diciendo: "OH, que bonito!", "OH, que bien pintas!", "OH, que dibujo mas chuli!", hasta que hemos llegado al apartado 11 del cuaderno de tareas: La familia.
La tarea consistía en un dibujo de 4 estancias de la casa:
1. Dormitorio infantil
2. Cuarto de baño
3. Sala de estar
4. Cocina
Y 4 stickers para pegar en cada una de ellas (imagino que a tu libre elección).
Para quien no sepa y no haya vivido el apasionado mundo de esta palabra anglosajona por paredes, suelos y restos de superficies planas, ahí va una sencilla definición de nuestro San Wikipedia:
"Una pegatina (a menudo también denominada adhesivo, calcomanía o sticker, del inglés to stick, pegar) es un soporte de texto o imágenes impresas o serigrafiadas sobre una lámina de vinilo o papel en cuya parte posterior se ha dispuesto de una fina capa de adhesivo."
Entre estos 4 stickers se encontraban 4 roles: hermana pequeña, hermana mayor, papá y mamá.
Hasta ahí todo correcto, mi sobrina es un lince, y sabe identificar cada papel.
La hermana pequeña en el dormitorio infantil: bien,
la hermana mayor en el cuarto de baño: vale, si es que tiene ganas,
papa en la sala de estar y mama en la cocina!!
Ole, ole y ole! Eso es lo que se dice educar basándose en los derechos de la igualdad.
Pero es que el creador@ de los stickers ha ido aun más lejos: A papa le ha puesto batín, zapatillas de estar en casa y un pedazo mando de televisión y a mama le ha puesto unos tacones y un delantal con lamparones!!
Pero vamos a ver, si al niño@ ya le fabricas al papa con el mando, evidentemente no te lo va a meter en el cuarto de baño, lógico, que podría, porque algunos se llevan el Marca que no es tan duro y entretiene mas. Y si a la mama le pones el delantal con manchas como que no va a irse a la cama de 90 a dormir (las mujeres nos lo quitamos antes de), sin hablar de los tacones de 10 cms que llevaba la pobre mama, que tienen que ser la mar de incómodos mientras haces unas lentejas con chorizo.
Si bien es cierto que solo es un juego y que no pretende ofender a nadie, yo me he quedado perpleja y se lo he enseñado a mi madre (la abuela), esbozando una sonrisa lo ha dicho todo (ella así lo ha vivido). Pero mi sobrina, que el próximo enero cumplirá unos maravillosos 4 años, que todavía esta muy lejos de la edad del pavo y que lo único que sabe de los hombres es que "Alejandro me tira del pelo", mi sobrina, debería saber que papa puede estar en la cocina con el delantal ó sin el y que mama podría estar tirada con el poder del mando en la mano.
Sin embargo al ver mi cara de asombro me ha mirado con su dulce carita y me ha dicho: "Tía, papa a veces también esta en la cocina..."
Si cariño, a veces lo está, pero por desgracia mama pocas veces esta tirada en el sofá.....
Ojala dentro de unos años podamos pegar esos stickers donde queramos sin que nadie se sorprenda, ojala...
